Muchos de los ingredientes de Coca-Cola son nocivos para la salud, algunos potencialmente. Hacemos un repaso:
El ácido fosfórico (E-338) que es un corrosivo de uso industrial utilizado como aditivo. En el cuerpo provoca desmineralización ósea, esto significa que no permite la adecuada absorción de calcio en el organismo, debilitando los huesos y por tanto incrementándose la posibilidad de tener fracturas. Puede producir nerviosismo y falta de concentración en los niños, problemas gastrointestinales y problemas de enzimáticos del metabolismo, en algunos casos se ha comprobado la relación con la osteoporosis y la osteomalacia. En talleres este componente se usa para limpiar motores o aflojar los tornillos oxidados
Además, la combinación de este ácido con azúcar refinada y fructuosa dificulta la absorción de hierro, lo que puede generar anemia y mayor facilidad para contraer infecciones, principalmente en niños, ancianos y mujeres embarazadas.
En 2012, Coca-Cola fue obligada a reducir un componente cancerígeno (4-metilimidazol o 4-MEI) de sus latas y botellas en EEUU, pero no en España (leer 2º parte de la noticia)
Una lata de Coca Cola contiene aproximadamente 50 mg. de cafeína, cantidad más que excesiva para los niños.
Coca Cola contiene también gas carbónico, que provoca "adicción psicológica". En realidad, beber Coca-Cola o Pepsi es beber bióxido de carbono. El color característico de la Coca Cola se debe a un aditivo llamado e-150, este ha sido asociado con deficiencia de vitamina B6 que es importante para la metabolización de las proteínas y la salud de la sangre, su carencia puede producir anemia, depresión y confusión entre otros síntomas, además de generar hiperactividad y bajo nivel de glucosa en la sangre.